Una dieta equilibrada es esencial para mantener una buena salud a medida que envejecemos. Comer una variedad de alimentos ricos en nutrientes puede ayudar a prevenir enfermedades y mantener una buena energía.
Principios de una Dieta Saludable:
Frutas y Verduras: Consúmelas en abundancia para obtener vitaminas y minerales esenciales.
Proteínas Magras: Incluye fuentes de proteína como pollo, pescado, frijoles y nueces.
Granos Enteros: Opta por granos enteros en lugar de granos refinados para una mejor digestión.
Consejos Prácticos:
Planifica tus Comidas: Organiza tus comidas para asegurarte de que sean equilibradas.
Mantente Hidratado: Bebe suficiente agua a lo largo del día.
Modera el Consumo de Azúcar y Sal: Reduce el consumo de alimentos procesados y ricos en azúcar y sal.